Solbes reclama para España más peso en el Fondo Monetario
España, convertida desde principios de los años ochenta en país acreedor en el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, tiene reconocido en estas instituciones un peso inferior al de las aportaciones que realiza, según comentó el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, en la apertura de la Conferencia que sobre Dólar, deuda y déficit se celebra en la sede del Banco de España en conmemoración del sexagésimo aniversario de los acuerdos de Bretton Woods. Solbes sugirió que, cuando se produzca alguna modificación de carácter general en las participaciones en estos organismos, la reclamación de España sea tenida en cuenta y se vea reflejada en la representatividad formal. En apoyo de su tesis, el ministro apuntó que la contribución de España a iniciativas como la de ayuda a Países Pobres Altamente Endeudados (HIPC) es bastante más alta que su peso en los organismos internacionales, hasta situarse como séptimo país donante por este concepto. En términos globales, evaluó, España ha asumido reducción de la deuda por un 3,89% de la deuda total suministrada por los países industriales, y su contribución por habitante supera a la de los principales países del grupo de los más siete más desarrollados (G-7). La sesión inaugural de la conferencia conmemorativa sirvió para poner de manifiesto las diferentes visiones del papel de las instituciones financieras internacionales. El nuevo responsable ejecutivo del FMI, Rodrigo Rato, advirtió que no sería realista esperar que las crisis desaparezcan, pese a los avances llevados a cabo en la función supervisora, y a los ejemplos de éxito en la gestión de episodios tan relevantes como los de México en 1995, Corea en 1997 y Brasil en 1998.