«Quien venda su cuota láctea pagará un peaje a la reserva nacional»

Convertir el sector lácteo en un tema prioritario y lanzar un plan renove que potencie la renovación de la maquinaria agrícola que se usa en el campo son algunos de los temas prioritarios del Ministerio de Agricultura. Así lo explica Fernando Moraleda, un sindicalista que se ha convertido en secretario general de Agricultura y mano derecha de Elena Espinosa. -¿Cómo se encontraron el antiguo territorio de Miguel Arias Cañete? -Todavía no hemos tenido tiempo de evaluarlo porque nos encontramos sin nada. -Estaban en blanco... -No, en blanco no. Sabíamos lo que queríamos hacer, pero no conocíamos sobre qué territorio íbamos a poder andar. Estamos enterándonos ahora un poco, sobre todo de compromisos institucionales que son ineludibles. -Eso les perjudicó en la negociación del tabaco. -Las negociaciones europeas no consisten en un símil de fútbol, de hacer un regate magistral de última hora y meter un gol por la escuadra y encima ganar. (...) La peor decisión fue decir que no, sabiendo las consecuencias. Pero probablemente fue la decisión más responsable porque era no mentir a la sociedad, era decir que no podemos aceptar en estas circunstancias esa salida a la negociación y promover seis días después un hecho que nunca antes se había producido y que era que un comité especial de agricultura modificara la decisión de un Consejo de Ministros. -Y ahora que ya se han puesto al día, ¿cuales son sus trabajos más inmediatos? -Queremos combinar las actuaciones coyunturales con actuaciones estructurales. La supresión del certificado veterinario es una prioridad. (...) Después queremos convertir al sector lácteo en un sector prioritario porque está desestructurado. En él se ha hecho mucha política liberal y muy poca política pública. La prueba evidente es que un litro de cuota cuesta casi el triple de lo que vale el producto cuando el ganadero lo vende a la industria. La gestión pública es fundamental. -¿Y por dónde empezarán? -Hay que promover programas de abandono del campo ordenados y bien dotados económicamente. Dentro de unas semanas promoveremos un programa con 25 millones de euros para obtener cerca de 40.000 toneladas de leche para poder pagar un precio digno a los que quieran dejar la producción y poder revertir esa leche que el Estado rescata en la reserva nacional hacia explotaciones que deseen continuar. -¿El reparto de cuota seguirá siendo en función de la producción? -Vamos a hacer un programa nacional, donde tomaremos en consideración el esfuerzo público en el presupuesto, tener una reserva nacional bien dotada, no para tener 7.000 toneladas que ha sido el último programa de abandono. (...) Hay que enfriar el astronómico precio de la cuota. -¿Qué mecanismos van a emplear? -Los mismos que están usando los conservadores en Francia. Al que quiera vender cuota, habría que ponerle un peaje para que sepa que si quiere venderla en el mercado libre, una parte tendrá que ir a la reserva nacional. Luego aplicaremos rigurosamente el sistema de cuotas. -¿Intensificarán los controles? -Empezaremos con un sistema de inspección en colaboración con las comunidades autónomas. Empezaremos por quien más se salga de la norma. Lo haremos con sentido común. No vamos a utilizar a la Guardia Civil como mecanismo que lo único que hace es reflejar el fracaso de la política. Cumpliremos el sistema de cuotas dentro de un programa plurianual del sector lácteo que dará con-fianza a todos los operadores del sector. Luego tendremos que reducir la dualidad que existe en el sector, por un lado explotaciones muy grandes y otras muy pequeñas, algo que es absurdo. Se ha producido una concentración anormal por falta de dotación pública.