Los carburantes estrenan octubre con nuevos máximos históricos

Ayer volvieron a subir los precios medios de los carburantes en España, marcando nuevos máximos históricos tras aumentar 0,3 céntimos de euro por litro el gasóleo de automoción y 0,1 céntimos la gasolina sin plomo 95 y la súper sin plomo, según los precios de venta al público de los carburantes que facilita el Ministerio de Industria en su página web. Con la subida de ayer, las gasolinas acumulan tres encarecimientos casi consecutivos, registrados en apenas una semana. La subida de las cotizaciones internacionales de los derivados del petróleo impulsadas por el encarecimiento del barril de crudo presiona al alza los precios que llegan al consumidor. La situación se agrava en el caso del gasóleo por la llegada del otoño, época en la que aumenta el consumo de calefacción, y por el déficit de este producto en Europa. El precio medio del gasóleo de automoción se situó ayer en 81 céntimos de euro por litro, frente a los 80,5 céntimos del lunes y a los 79,1 céntimos del 1 de septiembre. La subida ha sido aún mayor en el caso del Nuevo Gasóleo A, que ha pasado de 82,1 céntimos a principios de septiembre a 84,6 céntimos ayer. Desde el lunes, este carburante se ha encarecido en 1,1 céntimos de euro por litro. En el caso de las gasolinas, la sin plomo de 95 octanos ha subido 0,2 céntimos en esta semana (de 91 céntimos a 91,2) y 1 céntimo en el plazo de un mes (de 90,2 céntimos a 91,2). La misma evolución ha experimentado la sin plomo de 98 octanos: 0,2 céntimos en una semana (de 99,7 céntimos a 99,9) y un céntimo en relación al 1 de septiembre (de 98,9 céntimos a 99,9). La súper de 97 octanos se sitúa en la actualidad en 98,4 céntimos, 0,2 céntimos más que el lunes (98,2 céntimos) y 1,1 céntimos por encima de hace un mes (97,3 céntimos). Matriculaciones Las ventas de coches crecieron un 6,2% el mes pasado, en el mejor septiembre de su historia, aumento que se duplica en el caso de las operaciones que se han realizado en lo que va de año, un 11,6% más que en el mismo período de 2003. La demanda de particulares y empresas, que por ahora no denotan el temor a un petróleo más caro, se confirman como los grandes soportes de la buena marcha de la industria automovilística, y compensan con creces el retroceso de las compañías de alquiler por la desaceleración del negocio turístico. Si antes del verano fabricantes, concesionarios y vendedores se mostraban más remisos a hablar de un máximo histórico a finales de 2004, los datos de ayer les llevaron a dar por segura esa marca, salvo «acontecimientos extraños». Alcanzar el millón y medio de automóviles matriculados en un solo año ya no es un mito, y con mantener una evolución ascendente similar a la del último trimestre de 2003 se podría llegar a ella, e incluso superarla.