Castilla y León, la octava comunidad con más bajas por accidentes laborales
La comunidad de Castilla y León a pesar de registrar un retroceso del 3,8 por ciento, se coloca como la octava comunidad que registra más bajas entre sus empleados por la siniestralidad laboral. En con creto, se cuantificaron un total de 26.374 bajas por esta causa en los ocho primeros meses del 2004. Le supera en este ranking las comunidades de Cataluña, con 105.036 casos, seguido de Andalucía, con 96.829, Madrid, con 75.414, la comunidad Valenciana , con 64.006, Galicia, con 30.931 y El País Vasco y Canarias que sumaron cada una más de 28.000 casos. En el otro extremo de la balanza, las comunidades que mejor pasan este estadística laboral con menos de 20.000 siniestros figuron fueron Baleares, con 16.200, Murcia, con 15.914, Aragón con 13.387, Asturias con 12.623. Le siguen en esta lista de las comunidades con índices más bajos en siniestralidad laboral es Extremadura con 9.979, Navarra con 8.593, Cantabria con 6.321, La Rioja con 3.663, y Ceuta y Melilla que no llegan al centenar. En total en España fueron 608 personas las que perdieron la vida en accidentes laborales en los ocho primeros meses de 2004, lo que supone un descenso del 10 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, según datos del Boletín de Estadísticas Laborales del Ministerio de Trabajo. En el resto bajó la siniestralidad También sigue esta tendencia de descenso el número total de accidentes de trabajo con baja (que sumaron un total de 567.229. Esta cifra supone una disminución de un 4,2 por ciento en los datos acumulados hasta agosto. De estos accidentes con baja, 559.688 fueron leves (-4,1%) y 6.933 graves (-9,9%). Analizando por sectores económicos, los accidentes de trabajo con baja se redujeron en servicios, con una caída del 6,9%, y en construcción (-5,5%), y crecieron en agricultura (3,4%) y en industria (0,3%). Pero no todo han sido descensos. En el período comprendido entre enero y diciembre se produjeron 53.771 accidentes «in itinere» con baja, lo que supone un incremento del 6,4 por ciento. De ellos, 350 siniestros resultaron mortales, con un fuerte crecimiento del 19,5 por ciento (debido a que se contabilizan algunas de las víctimas de los atentados terroristas del 11-M). Asimismo, el número de casos de enfermedades profesionales que causaron baja del trabajador hasta agosto ascendió a 15.549, con un ligero descenso del 1,2 por ciento.