| Crónica | Estudio de consumo |
Peligro: hombre joven compra solo
El varón menor de 34 años que vive solo gasta hasta un 40 por ciento más en compras que las mujeres de su edad
«Hacer la compra» ha sido tradicionalmente una expresión netamente femenina; sin embargo, es algo más que habitual para los hombres menores de 34 años que viven solos y que gastan en esta actividad un 40 por ciento más que las mujeres de su edad, según revela un informe de TNS Masterpanel. El estudio de esta consultora señala que este fenómeno se aprecia sólo en este perfil de la población, ya que los hombres más maduros, de entre 35-49 años, gastan lo mismo en la cesta de la compra que las mujeres, unos 17 euros y una media de 11 artículos. En el pasado, el hombre estaba muy poco involucrado en las compras tanto familiares como unipersonales, pero la progresiva incorporación de la mujer al mundo laboral y otros cambios sociales, según el informe, hace que uno de cada seis actos de compra los realice el sector masculino. Lo más demandado Aunque entran los mismos productos en cestas de hombres que de mujeres, estos tienden a llenar el carro de bebidas alcohólicas, agua y refrescos, área a la que dedican el 61 por ciento del gasto total de una compra, así como de platos de rápida preparación, alimentación para perros y cuchillas de afeitar. Según la directora del Servicio de Clientes de TNS Worldpanel, Raquel Arribas, el hombre no está tan preocupado por el precio como por la calidad, ya que sólo el 4,7 por ciento declaró en este estudio que siempre buscan el precio más barato por encima de todo. Además, son más fieles a sus establecimientos que las mujeres, les gusta comprar en hipermercados y Discount y han incrementado notablemente sus compras en productos de imagen personal, sobre todo en cremas y lociones. El hombre se acerca cada vez más a la mujer, según Arribas, en la preocupación por el cuidado de su imagen personal, y es que el 20 por ciento del total de clientes que acude asiduamente a un centro de estética en España corresponde al sector masculino. Tampoco olvidan la salud y la dieta, ya que, según este estudio, desde 2001 la población masculina ha incrementado el consumo de yogures desnatados o tipo Bífidus, los mayores de 35 años incorporan cada vez más a su dieta galletas integrales y leche desnatada, y por encima de los 50 años destacan en el consumo de pan integral. Así, el informe detalla un modelo social de hombre que ha cambiado progresivamente el batín por el albornoz, que tiende a vestir con prendas cómodas e informales elige las tiendas por la «calidad de la confección».