Se dispara la inflación

UN CÚMULO DE factores ha disparado la inflación de marzo: la subida exorbitante del precio del petróleo ha elevado el de los carburantes y, consiguientemente, el del transporte y la calefacción; el final de las rebajas y el comienzo de la temporada ha provocado subidas en ropa y calzado; las heladas del invierno han repercutido al alza sobre el precio de ciertos alimentos En definitiva, el IPC del pasado mes ha subido el 0,8%, hasta el 3,4% interanual (2,9% el subyacente), y se eleva asimismo el diferencial de inflación con respecto a la Eurozona, a pesar de que ésta ha acusado asimismo un alza general de los precios. Este último elemento afecta negativamente, como es natural, a nuestra competitividad y amenaza a nuestro ruinoso sector exterior, que lleva tiempo resintiéndose de las crónicas tensiones inflacionistas. Asimismo, la subida del crudo podría terminar convenciendo al Banco Central Europeo de la conveniencia de elevar los tipos de interés, con el consiguiente perjuicio para quienes pagan una hipoteca, aunque ello contribuiría a enfriar el sector vivienda y a mitigar de paso nuestra inflación.