Todas las organizaciones, salvo Asaja, satisfechas con la medida que busca la transparencia del mercado
El Gobierno remodela el sector lácteo para combatir la especulación
En el programa de abandono se aceptarán todas las solicitudes enviadas hasta el 29 de junio
El Consejo de Ministros aprobó ayer la puesta en marcha del Plan de Reestructuración del sector lácteo, cuyo objetivo es favorecer la competitividad de las explotaciones, especialmente en las zonas de mayor vocación y dedicación lechera, y garantizar la transparencia en la compra-venta de cuotas. Todas las organizaciones agrarias, salvo Asaja, donde se integran las grandes explotaciones, se han mostrado satisfechas por el plan, pues consideran que acabará con la especulación, al establecer el control público del reparto de cuotas y favorecer a las explotaciones más necesitadas. Los ganaderos del sector piden que este programa se prorrogue más allá de la campaña 2005-2006, algo a lo que parece que está abierto el Gobierno. Mayor transparencia El Plan, que no excluye a ninguna explotación, supone una «apuesta decidida», afirma el Gobierno, por aquellas que quieran permanecer en la actividad y que más necesitan dimensionarse, a las que se ofrecerá cuota láctea a precios reducidos. El objetivo es dar transparencia al mercado de cuotas, que ha provocado en los últimos años, según el Mapa, una «espiral al alza» de los precios «difícilmente asumible» por la mayoría de los ganaderos, cuando se trata de un derecho de producción meramente administrativo. Del actual sistema de transferencias de cuotas se pasará a otro orientado por la Administración, en el que en el mismo periodo y con los mismos recursos financieros, se instrumente simultáneamente un «gran programa de abandono» y la distribución posterior de esa cuota a través del Fondo Nacional de Cuotas Lácteas, pudiendo los ganaderos elegir lo que más le convenga. En el Programa de abandono se aceptarán sin limitaciones todas las solicitudes enviadas al Mapa hasta el 29 de junio, estableciéndose un baremo sobre el importe a cobrar por cada kilo de cuota indemnizable y en función de la edad de los interesados. El plan establece un reparto de cuota, procedente del Fondo Nacional, a un precio de 0,50 euros por kilo, para todas las solicitudes presentadas en las oficinas de las comunidades autónomas antes del 21 de junio. Cumpliendo el compromiso del Gobierno, los ganaderos con una cuota asignada inferior a 250.000 kilos se considerarán como preferentes.