Recorte «brutal» de ayudas, que serán la mitad en cinco años

El Gobierno dio a conocer también la relación anual de ayudas, que plantea como regresivas. En el Plan del Carbón actual la reducción se contabiliza de forma global, de manera que si el número de empresas que cierra alcanza una reducción suficiente, el resto mantienen su producción y su volumen de ayudas. Ahora el Ejecutivo propone que la reducción sea individual, de un 2% en el caso de la minería subterránea y del 3% en las minas a cielo abierto. Unos porcentajes que cuestionan los sindicatos, al considerar que lejos de favorecer el establecimiento de una reserva estratégica segura en la minería subterránea, favorece que los empresarios se acojan al menor coste de la de superficie. La propuesta última del Gobierno es dejar una producción de 10,4 millones de toneladas en el 2007; y de ocho millones de toneladas en el 2012. Estas cifras supondrían una reducción de las ayudas que la parte social califica de «brutal»: pasaría de los 322 millones del 2007 a una previsión de 164, la mitad, para el último año de vigencia del plan. Un documento presentado por Carbunión rechaza también la reducción de producciones individual, y propone una reducción global del 4% hasta el 2007 y a partir de entonces, cuando la producción sea prácticamente la necesaria para la reserva estratégica, se propone una reducción del 2%, que también tendría un carácter global, no de aplicación individual sobre todas y cada una de las empresas.