«Katrina» golpea de lleno a la industria petrolera de EE. UU.

Las heridas infligidas por Katrina a la industria petrolera estadounidense tardarán mucho en sanar y sus efectos sobre la cotización del crudo seguirán siendo visibles todavía durante algún tiempo. Así lo aseguran los analistas, quienes subrayan que los daños sufridos han superado con creces a los previstos. El 20% de la producción de petróleo y el 10% de la capacidad de refino de Estados Unidos está inutilizada. El parte de lesiones es, como poco, desalentador: nueve refinerías se han visto obligadas a cerrar sus puertas en Luisiana y Misisipi (tres de ellas están bajo el agua), otras cuatro están a punto de hacerlo porque casi han agotado ya el crudo que tenían almacenado, varias plataformas han sido arrastradas hasta tierra y decenas de ellas han sufrido importantes daños. Otros perjuicios Por si esto fuera poco, la mayoría de los oleoductos, puertos y estaciones de bombeo han tenido que abandonar su actividad. Mientras, los daños sufridos por los oleoductos submarinos todavía tardarán algunos días en conocerse. Los expertos aseguran que las refinerías tardarán una o dos semanas en volver a funcionar, mientras que para que se recupere el ritmo normal de bombeo de crudo habrá que esperar meses.