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La empresa gasista se ha dirigido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores para quejarse

Gas Natural denuncia los intentos de Endesa de perturbar la opa

La eléctrica cree que los cambios en los estatutos atentan contra el buen gobierno

Publicado por
María José Alegre - madrid
León

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El cruce de acusaciones entre Endesa y Gas Natural crece. Este viernes, la empresa gasista se ha dirigido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores para denunciar «los intentos de Endesa de confundir a los inversores» que, a su entender, persiguen «perturbar el normal funcionamiento de la Oferta Pública de Adquisición (opa)» y «hurtar a los accionistas su legítimo derecho a decidir». Pide al supervisor que investigue las afirmaciones de los altos directivos de Endesa, y que adopte las medidas correctoras que considere adecuadas. Gas Natural ha venido acumulando argumentos para esta denuncia -apunta- desde que Endesa anunció su estrategia defensiva, y desatendió sus continuos requerimientos. La gota que ha desbordado el vaso ha sido la pretensión de la eléctrica de involucrarle en incumplimientos formales ante el supervisor del mercado de valores norteamericano (SEC). La empresa gasista asegura que tales acusaciones carecen de fundamento, porque ha venido manteniendo los contactos y comunicaciones precisos con la SEC, y anuncia que dará cumplida respuesta ante sus autoridades. La Caixa ya rechazó a última hora del jueves las denuncias de Endesa ante el regulador del mercado de Estados Unidos -y su acusación de hurtar información a los inversores-, y advirtió que la eléctrica sólo intenta impedir que la OPA se tramite. Accionistas Pero Gas Natural considera que ni éste ni los precedentes pasos dados por Endesa pueden beneficiar a sus accionistas, sino que se inscriben en la «estrategia de confrontación» desarrollada por los actuales presidente, Manuel Pizarro, y consejero delegado, Rafael Miranda. Endesa considera que los cambios que introducirá Gas Natural en sus estatutos sociales en el caso de que triunfe la Oferta Pública de Adquisición de acciones (opà) lanzada sobre la eléctrica «suponen una amenaza y un marcha atrás en las normas de buen gobierno corporativo», apuntaron hoy a Europa Press en fuentes jurídicas próximas a la compañía.