La luz subirá una media de 2 euros al mes y se penalizará el derroche

El Ministerio de Industria prepara una subida de la tarifa eléctrica para los consumidores domésticos del 4,48% de media para el año que viene. El departamento que dirige José Montilla ha remitido la propuesta a la Comisión Nacional de la Energía (CNE), y una vez que este organismo se pronuncie, la llevará al último Consejo de Ministros de este ejercicio, el 30 de diciembre próximo, para su aprobación definitiva. El incremento del precio recoge los dos puntos de alza tope que establece la actual metodología de cálculo de los precios. Sin embargo, este sistema permite al Ejecutivo aplicar subidas adicionales en función de los cambios regulatorios que se produzcan durante el año. Así, el 2,48% restante responde tanto a la aprobación del plan de ahorro energético como a la estrategia de impulso de las energías renovables. Además, el repunte de los precios regulados se debe a una revisión del régimen especial extrapeninsular. Este sistema regula el servicio que reciben las islas y ha sido puesto en cuestión las últimas semanas por los cortes de suministro que ha sufrido Canarias a raíz de la tormenta tropical Delta . La propuesta prevé, asimismo, una penalización de 1,3 céntimos por cada kilovatio a la hora que se consuma por encima 650 Kv/h al mes. Un consumo, apuntan fuentes del sector, muy superior al normal de una familia, por lo que la media sólo afectará a los auténticos derrochadores. Para un usuario doméstico medio, con un consumo anual de 3.000 kilovatios/hora y una factura media de 31 euros al mes en el 2005, el incremento propuesto de la tarifa supondrá un encarecimiento del recibo de la luz de 1,40 euros al mes, IVA incluido. Además, la tarifa 1.0, o tarifa social, utilizada por los consumidores con menor poder adquisitivo, subirá un 1,4%, significativamente por debajo de la media. Fin al baile de cifras Ha terminado el baile de cifras que en los últimos meses ha copado todas las conversaciones en el sector eléctrico. Después de especular con subidas de la tarifa doméstica de hasta un 20%, una posibilidad ni siquiera contemplada por el Gobierno pero sugerida por las empresas, el número exacto ha sido el 4,48%. Por encima del 2%, tal y como habían reconocido varios responsables del Ejecutivo, pero muy lejos de las aspiraciones de las compañías. El Ministerio de Industria también propondrá un revisión al alza del 4,24% de la tarifa del gas para los consumidores domésticos a aplicar a partir de enero. Este incremento, que responde a la revisión de costes trimestral en el sector, obedece a la subida de los precios del crudo y sus derivados (el coste del gas está ligado al del petróleo), ya que el crecimiento de la demanda permite cubrir los gastos. El problema de este hidrocarburo de uso creciente es la feroz competencia internacional para abastecerse. También pesa el hecho de que España no cuenta con infraestructuras suficientes de cara al futuro, con las que responder a la fuerte demanda de gas natural.