El Gobierno dará el 50% del IRPF para?que?lo?gestionen?las?autonomías

El ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, consideró ayer que «no es descabellado pensar» en la cesión del 50 por ciento del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a las comunidades autónomas, dentro de la reforma de la financiación autonómica. Solbes reconoció que, en la negociación del Estatuto de Cataluña y del modelo de financiación autonómica «una de las fórmulas» que se están barajando es la cesión de más porcentaje del IRPF «en la medida en que sea necesario», lo que cambiaría el actual modelo, según el cual el Estado compensa las diferencias de financiación con el fondo de suficiencia. El ministro apuntó que para respetar también la «autonomía del Estado» hay que ir a espacios fiscales diferenciados, y en su opinión hay algunos impuestos que, por sus características, «tienen mejor condición para ser impuestos estatales», y en concreto se refirió al Impuesto de Sociedades y al IVA. El vicepresidente económico anunció que llevará «en las primeras semanas del año» la reforma fiscal al Consejo de Ministros, con la que se pretende dar cumplimiento, entre otras cosas, al compromiso electoral del PSOE de «devolver a los ciudadanos» parte del superávit público rebajando los impuestos. Del IRPF, recordó que se pretende disminuir la carga tributaria de las rentas del trabajo para aumentar «la equidad horizontal» del impuesto, por lo que la reforma incluirá una «moderada reducción» de tarifa marginal y una reducción de tramos que «previsiblemente serán tres o cuatro». Preferencias de los ciudadanos También señaló que otro aspecto de la reforma del IRPF será el «aumento de la neutralidad en el tratamiento fiscal de las distintas fuentes de ahorro», para que las inversiones que decidan los ciudadanos se basen «en sus preferencias de renta, habilidad y riesgo financiero» y no en los condicionantes impositivos que éstas tengan. Solbes consideró por otra parte que el IRPF «no puede ser ajeno» al envejecimiento de población, y por eso «se incentivará» el ahorro destinado a pensiones complementarias y «se favorecerán todas aquellas fórmulas que contribuyan a hacer frente a las situaciones de dependencia». Asimismo, señaló que otro punto de la reforma es la regulación de la deducción por vivienda habitual, de la que aseguró se beneficiarán más de 5,5 millones de ciudadanos, y consideró que esta medida «no introduce distorsiones en el impuesto», al tener un límite de 9.000 euros por persona. Por esa razón, añadió, en el nuevo impuesto se van a mantener los incentivos fiscales a la vivienda «con algunas correcciones menores que no supondrán la reducción del límite máximo de la base de la deducción».