La tabaquera anuncia también el cierre de dos centros, uno en Tres Cantos y otro en París
La Ley antitabaco lleva a Altadis a recortar 233 empleos en España
La reducción de plantilla afectará también a 239 trabajadores en Francia
Fachada de la oficina central de Altadis, en Madrid
El grupo Altadis comunicó ayer a sus comités de empresa de Madrid y París un plan de reestructuración que prevé la supresión de 472 empleos (239 en Francia y 233 en España). Además, la tabaquera anunció el cierre de la planta de I+D de Tres Cantos (Madrid) y del centro de distribución de la región norte de París. La empresa hispanofrancesa dio a conocer estas me-didas en plena guerra de precios, desatada en el sector después de la aprobación de la ley antitabaco, y tras los rumores que apuntaban a una inminente opa de la británica Imperial Tobacco. Hace menos de dos semanas, Altadis estimó que la guerra de precios tendrá un impacto negativo de unos 250 millones de euros en su cuenta de resultados brutos correpondiente a este año. Ayer mismo, las marcas de tabaco más baratas del mercado subieron sus precios, con lo que la cajetilla de Excite pasa a costar 1,75 euros, 40 céntimos más de lo que valía hasta ahora; la de Denim American Blend se sitúa en 1,65 euros; y la de Bull-brand 20, en 1,70 euros. Tras la decisión adoptada el viernes por el Consejo de Ministros de establecer una imposición mínima de 1,10 euros por cajetilla, ya no eran rentables los paquetes que valieran menos de 1,65 euros. El objetivo de Altadis, según un comunicado emitido tras la reunión, es «mejorar su organización en términos de calidad de servicio y flexibilidad» para afrontar «un entorno económico y regulatorio muy exigente y en un marco competitivo cada vez más agresivo». La compañía hispanofrancesa tiene previsto dedicar 94 millones de euros a las medidas de acompañamiento de este ajuste, con el que espera ahorrar anualmente 55 millones. Daniel Jadraque, de UGT, el sindicato mayoritario en el co-mité, del que también forman parte Comisiones Obreras, CGT y CPI, valoró muy negativamente la medida, y aseguró que la empresa argumentó en la reunión que «ya solamente se puede crecer con una mayor eficiencia». El nuevo plan de ajuste se suma al anunciado en el 2003, que ha supuesto ya la salida de 1.167 trabajadores (533 en Francia y 634 en España), a los que se añadirán otros 264 en España antes de finales del 2007. El proyecto de reestructuración, que ha contado con el asesoramiento de la consultora Accenture, tiene como objetivo reorganizar los servicios centrales y las áreas de márketing y ventas. En el primer caso, se trataría de racionalizar la estructura de la compañía, evitando duplicidades de puestos de trabajo en Francia y España, aunque no se cerrará la sede parisina.