Los sindicatos reconocen el acuerdo, pero aseguran que todavía no está cerrado
Caldera anuncia un plan para que el empleo temporal seaindefinido
La medida estaría incluida dentro de la reforma pactada entre Gobierno, patronal y sindicatos
El titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, adelantó ayer la existencia y posterior aplicación de un plan de choque para convertir masivamente empleo temporal en indefinido, pero rehusó explicar las líneas del proyecto. El anuncio del ministro sorprendió a los sindicatos. El líder de UGT, Cándido Méndez, que se encontraba en Sevilla, se limitó a indicar que se trata de una medida que «probablemente» se pondrá en marcha con la reforma laboral. En CC.OO., las palabras de Caldera produjeron malestar «porque todavía no hay nada cerrado». Un portavoz de este sindicato lamentó que este Gobierno lance como realidades cambios que todavía no se han pactado. A su juicio, «el anuncio ha sido muy prematuro». Las declaraciones del responsable de Trabajo tuvieron lugar en la Escuela de Minas, donde pronunció una conferencia contra la siniestralidad laboral. Recordó que la precariedad en el empleo está unida a los accidentes de trabajo y resaltó que la reforma que se avecina recogerá iniciativas para mejorar sustancialmente la calidad del empleo. Caldera señaló que el «plan de choque» funcionará durante un periodo de tiempo limitado y contará con ayudas públicas. Asimismo apuntó que otros cambios irán destinados a incentivar la contratación indefinida en origen, para evitar que los empresarios se inclinen en primera instancia por las colocaciones eventuales. Despido más barato Otra de las reformas consistirá en que todo trabajador que desempeñe desde hace dos años un empleo temporal en la misma empresa pase a ser indefinido. Con esta medida se pretende evitar el encadenamiento de contratos con fecha de caducidad. Diversos miembros de la mesa en la que se negocia desde hace más de un año la modificación de la normativa de trabajo apuntaron que el traspaso recogido por el «plan de choque» llevará implícito un coste de despido más barato que el correspondiente al contrato indefinido ordinario, establecido en 45 días por año con un máximo de 42 mensualidades. La indemnización barajada apunta a 33 días por ejercicio, con un tope de 24 pagos, la misma que conlleva el contrato fijo de fomento, instaurado en 1997 para determinados colectivos.