León, con un paro del 8,6%, es una de las que tiene una tasa más elevada
El pleno empleo masculino es un hecho en 24 provincias españolas
Sólo las mujeres de Baleares y Castellón se acercan a la tasa de paro residual, fijada en el 5%
Al término del tercer trimestre de 2006, el pleno empleo masculino, es decir, contar con una tasa de paro igual o inferior al 5%, fue un hecho en 24 provincias. La situación resultó mucho peor entre las mujeres. Sólo las de Baleares y Castellón, con un porcentaje del 5,93%, se aproximaron al objetivo señalado. Por su parte, los varones de Huelva aparecieron los más alejados, con un índice de desempleo del 12,41%, porcentaje no obstante muy superado por el 22,81% del paro femenino de Córdoba, cuyas mujeres ocuparon el último lugar en el camino hacia la plena ocupación. El número de parados en León se cifra en el 8,6%, lo que sitúa a la provincia entre las diez de España que soportan un mayor índice de desempleados. En comparación con el tercer trimestre del 2005, León contabilizó 2.300 parados menos. En el año 2000, los jefes de Estado y de Gobierno de los Quince decidieron en Lisboa impulsar y coordinar sus esfuerzos para que en 2010 todos los países, que entonces eran miembros de la Unión, tuvieran pleno empleo. Los expertos mantienen que para España ese concepto supone dejar el paro en una tasa del 5%, integrada por aquellas personas sin cualificación, que se encuentran al borde de la exclusión social o que en un momento dado optan por cambiar de ocupación. Índice de desempleo a la baja Cuando el camino trazado en Lisboa ha superado su «paso del ecuador», España ha conseguido reducir sustancialmente el índice de desempleo. Lo ha bajado del 15,43% (31 de diciembre de 1999) al 8,15% registrado en la última Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre de 2006. Por género, la tasa masculina se quedó en el 6,02%, frente a la femenina que llegó al 11,11%. No todas las provincias han llegado a la meta impuesta por el mismo motivo. Algunos varones redujeron su paro gracias al desarrollo socioeconómico de la zona como ocurrió en Barcelona y Gerona, que a la vez que bajaron su desempleo al 4,86 y al 4,24% elevaron su tasa de actividad por encima de la media estatal (69,48%) hasta el 72,77 y 77,37%. Lo mismo ocurrió en Madrid, Castellón y Álava, que compaginaron unos índices de paro masculino del 3,82, 4,75 y 3,76% con unas proporciones de actividad del 73,17, 71,41 y 73,13%. También los varones de Baleares registraron un paro bajo y alta disponibilidad para el trabajo con unos datos del 3,88% y del 76,46%. Lo mismo ocurrió en Toledo, con 4,21% y 72,71%; y en Navarra, con 3,35% y 71,18%. Pero en otras provincias, la buena evolución laboral correspondió a cierta despoblación, emigración o caída de mano de obra, es decir, el número de personas con edad y ganas de trabajar se redujo.