Zapatero habló con Prodi y con Merkel, pero sólo de obviedades

José Luis Rodríguez Zapatero, Angela Merkel y Romano Prodi hablaron este viernes en Bruselas de Endesa, pero en sus declaraciones ulteriores intentaron restar dramatismo al encuentro, anunciando lo que debería ser una obviedad: que el futuro de la empresa está en manos de sus accionistas. Primero fue Angela Merkel la que, cuando accedía a la sede del Consejo de la UE, lugar donde se celebraba la cumbre, y al constatar que Zapatero la seguía, se volvió hacia él e improvisó un encuentro, para el que se reclamó la presencia inmediata de intérpretes. La conversación duró menos de un cuarto de hora de reloj. Su tiempo útil fue, sin duda, menor. En la rueda de prensa con la que Zapatero dio por concluida su asistencia a la cumbre, reconoció el encuentro con la canciller, y aseguró que había hablado con ella del «proceso que vive Endesa». «Hemos llegado a la conclusión -afirmó el presidente del Gobierno-, de que el futuro de la empresa está en manos de los accionistas, en los porcentajes que cada uno de ellos detenta». El encuentro del presidente español con la canciller alemana no estaba previsto. Lo dejó claro la víspera el secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda. Tampoco estaba previsto un encuentro con el presidente del Consejo italiano, Romano Prodi, pero tuvo lugar. Lo reconoció él mismo en su rueda de prensa. Dijo haber hablado del tema tanto con Zapatero como con Merkel. El presidente español no descartó volver a reunirse con la canciller alemana para seguir hablando de Endesa. «Por supuesto que lo haremos si es necesario», dijo.