Patronal y sindicatos crean un agente contra la siniestralidad en las pymes
Un «agente», elegido por las organizaciones empresariales y sindicales, bajo el amparo de las comunidades autónomas, velará por las buenas condiciones laborales de las empresas con plantillas de seis a 50 empleados que carezcan de acuerdo sectorial en el ámbito provincial. Así, su misión será frenar los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales. CC.OO. opina que esta figura será una realidad antes de junio. El nuevo vigilante deberá contar con formación adecuada y se encargará de visitar los centros de empleo, previo aviso. De esta manera, las patronales CEOE y Cepyme y los sindicatos CC.OO. y UGT han salvado el principal escollo que impedía la firma de una estrategia nacional contra la siniestralidad laboral, que cada año acaba con la vida de 1.000 trabajadores y se lleva elevadísimos recursos económicos. El proyecto fue propuesto, en su día, por el Gobierno dentro del diálogo social emprendido nada más llegar el PSOE a La Moncloa. Los sindicatos apostaron fuerte desde el principio por el delegado territorial. Los empresarios temían que con esta persona los trabajadores duplicaran sus canales de representatividad y se opusieron tajantemente. Al final el «agente territorial» resolverá el consenso. Sensibilización El Ejecutivo, consciente de que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales es insuficiente para erradicar los accidentes de trabajo y preocupado porque España encabeza los índices de siniestralidad de la Europa desarrollada, decidió aplicar una política coherente, capaz de erradicar los percances profesionales y de implicar a todos los agentes, tanto públicos como privados. La negociación ha pasado un periodo muy delicado. En noviembre del 2006, los contactos trilaterales quedaron suspendidos ante la imposibilidad de entendimiento, pero las reuniones del Ejecutivo con los empresarios y con los sindicatos por separado continuaron. El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, anunció en reiteradas ocasiones que habría estrategia «con o sin acuerdo entre las partes». Superadas las discrepancias, CEOE y las centrales se reunirán hoy para cerrar el acuerdo.