Los clientes podrían estar alargando el tiempo de compra a la espera de menores precios
La caída del sector aviva el riesgo de cierre de 18.000 oficinas inmobiliarias
Las agencias implicadas afirman que el cambio de ciclo sólo afectaría a las más debilitadas
Las agencias intermediadoras de viviendas comienzan a sufrir los efectos del llamado «cambio de ciclo inmobiliario» que ha supuesto un descenso de las ventas y obligado a muchas de las empresas a cerrar oficinas. La Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios (APEI) ya pronosticó hace unos meses que esta situación podría provocar el cierre de una de cada tres agencias inmobiliarias, de forma que se clausurarían 18.000 de las cerca de 60.000 oficinas que hay en España, según sus datos. La ralentización del crecimiento del precio de la vivienda en España ha dado lugar a una caída de los ritmos de venta, cuyo tiempo casi se ha duplicado en los últimos dos años, debido a que los compradores están a la espera de que bajen los precios. Según los datos recopilados por Efe, este hecho comienza a afectar a agencias de intermediación inmobiliaria, como Re/Max, Best House o Look & Find, que se están viendo obligadas a cerrar algunas de sus oficinas por la falta de negocio. Sin embargo, el caso más representativo parece ser el de la empresa Fincas Corral, según publicó el jueves pasado el diario económico «Cinco Días», que podría haber cerrado la mitad de las 350 oficinas con las que contaba a comienzos de año, aunque Efe no ha podido confirmar estos datos. Expertos del sector consideran que serán sólo las pequeñas agencias inmobiliarias especializadas en la segunda residencia de segunda mano y aquellas que no tengan un negocio diversificado las que sufrirán las consecuencias. «Antes la intermediación inmobiliaria estaba regularizada, es decir, que para ejercer había que ser agente de la propiedad, pero en 2004 se cambio la norma y comenzaron a surgir multitud de pequeñas agencias que han funcionado mientras ha habido negocio», explicó el consejero delegado de Roan, Jose Luis Marcos. Las inmobiliarias que tengan todas sus oficinas en propiedad, es decir, que no tengan franquicias -como es el caso de Fincas Corral- son las que pueden verse más afectadas con el cambio de ciclo, dijo Marcos en declaraciones a la Agencia Efe. Las inmobiliarias con negocios diversificados, como es el caso de Roan que apuesta fuerte por el negocio de la consultoría y apenas tiene 11 agencias, no tendrán ningún problema para sobrellevar la situación actual mientras que «aquellas empresas que vivan sólo del mercado residencial deben estar muy agobiadas», aseguró Marcos. El menor crecimiento de los precios de la vivienda esta afectando a las oficinas de Best House, aunque «de forma muy leve», aseguró el administrador de Best House, Didier Dupont. «Creo que son aquellas empresas de reciente creación o con poca infraestructura las que pueden verse más perjudicadas por el cambio del ritmo del sector», defendió.