El petróleo arrastra la inflación en enero hasta situarla en el 4,4%

La tasa de inflación interanual subió una décima en enero hasta el 4,4 por ciento debido, principalmente, al encarecimiento del petróleo y, en menor medida, de los alimentos, según el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) difundido por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De confirmarse esta cifra el próximo 15 de febrero, fecha en la que se publicará el dato definitivo del IPC español y del IPCA, se trataría de la tasa más alta de inflación armonizada desde 1997, fecha en la que comenzó a elaborarse este indicador, y superaría en dos puntos a la de enero del pasado año. Además, si el IPCA de enero coincide con la tasa de inflación española (IPC), se trataría de la cifra más alta desde hace casi más de doce años, en noviembre de 1995, cuando el aumento de los precios también alcanzó el 4,4 por ciento. La oficina estadística de la UE -Eurostat- difundió ayer un cálculo provisional de la inflación de la zona euro que, en enero fue del 3,2 por ciento, lo que, de confirmarse, mantendría el diferencial de precios con España en 1,2 puntos. Cifra esperada Tras conocer estos datos, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, indicó que pese a que la tasa del IPC armonizado de enero «no es positiva y es alta», se trata de una cifra esperada que no indica «crisis» ni «recesión». Añadió que el dato es coherente con lo esperado dado que las previsiones apuntan a un incremento de los precios hasta marzo, especialmente del petróleo y las materias primas, es decir, los productos importados que «están creando las mayores dificultades en este momento». El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, coincidió con las explicaciones de Solbes y reiteró que los precios se moderarán hasta situarse por debajo del 3 por ciento a finales de este año. Además, insistió en que el crecimiento de la economía y el superávit público dan «margen de maniobra, confianza y seguridad para actuar». Desde las filas del PP fueron varias las voces -Miguel Arias Cañete, Ángel Acebes y Manuel Pizarro- que alertaron sobre la elevada tasa de inflación y acusaron al Gobierno de, en su opinión, ignorar el problema y no adoptar ninguna medida para solucionarlo. Además, el número dos del partido por Madrid, Manual Pizarro, consideró que «hay que hacer una política que vaya a buscar la competitividad de la economía española y permita que los ciudadanos tengan productos lo menos caros posibles o lo más baratos posibles, que es de lo que se trata». También les pidió un giro en su política el portavoz de Economía y Hacienda de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, que suponga una reducción del 5 por ciento en el IRPF aplicable a salario y pensiones, y del 9 por ciento en el IVA de la factura del gas y la electricidad. Mientras, el coordinador de Economía y Mundo del Trabajo de IU, Javier Alcázar, advirtió al Gobierno de que no podrá controlar los precios, mientras que se mantengan los actuales índices de especulación empresarial, de fraude y de economía sumergida. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, coincidió con el Ejecutivo al indicar que aunque se trata de «un mal dato» era «previsible, porque el impacto del precio del petróleo va a seguir pesando como una losa» y auguró un cambio de tendencia a partir de mayo o junio. El indicador adelantado difundido ayer por el INE proporciona información de carácter orientativo, por lo que no tiene que coincidir con la tasa general de inflación (IPC). El INE elabora este indicador para incorporarlo al cálculo del índice adelantado del IPCA de la zona euro que publica Eurostat, con el objetivo de ofrecer datos equiparables a los confeccionados en Estados Unidos. El indicador adelantado se calcula utilizando la misma metodología que la empleada para el IPCA, con la única diferencia de la información que se utiliza ya que en el primero se han de estimar ciertos datos de los que en el momento de la publicación aún no se dispone.