Las grandes comunidades pierden peso en la matriculación de vehículos

El frenazo de la industria automovilística se ha dejado sentir más, frente a lo que cabía esperarse, en aquellos territorios con mayor número de población -y, por tanto, con más conductores, ya con carné o aspirantes a tenerlo-. Según la última memoria anual de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), las principales autonomías han perdido peso de forma clara en las matriculaciones de coches. Lo hicieron el año pasado -Cataluña, por ejemplo, redujo su cuota un 7,3%- y también en el presente -de enero a febrero perdieron un 9,8%-. El descenso en la renovación del parque rodado, cada vez más agudizado (en 2007 se acogieron al programa público de bajas incentivadas 140.000 vehículos menos que en 2005), también explica que el número de unidades vendidas cayera un 1,2% el pasado ejercicio, lo que a su vez terminó de convencer al Gobierno para finiquitar el llamado Plan Prever.