La crisis económica española provoca que el PIB sólo creciera el 2,8% durante el primer trimestre
El frenazo ya se dejó sentir con fuerza en la economía española en el primer trimestre del año, según la estimación adelantada por el Banco de España. En un marco de turbulencias financieras internacionales y escalada de precios del petróleo y las materias primas, el desplome inmobiliario, el repunte de los tipos de interés y el menor consumo de los hogares se tradujeron en una notable desaceleración del Producto Interior Bruto, que creció el 2,8%, el menor avance trimestral desde mediados de 2002, el año en que se hizo notar el impacto de la burbuja tecnológica.Pero aquel fue un bache aislado y poco profundo. Ahora, tanto los expertos privados como el servicio de estudios del instituto emisor temen que la desaceleración económica se prolongue. Por eso, la referencia que parece más cercana a la actual situación se encuentra en la etapa de salida de la crisis de 2003, allá por el año 1995. El aumento anual del PIB en el primer trimestre es siete décimas inferior al registrado en los meses finales de 2007. Mayor contraste ofrece la comparación con enero-marzo del pasado ejercicio, porque el crecimiento entonces registrado fue del 4,1%.