La bolsa cae un 2,93% arrastrada por las pérdidas en Estados Unidos

El Ibex-35 sufrió la séptima mayor caída del año. Desde el 11 de julio no perdió tanto en un solo día. El selectivo doméstico descendió un 2,93% y dio un último cambio en los 11.335,30 puntos. Según Banco Urquijo, la rotura de los 11.320 puntos llevaría al índice a tocar los mínimos del 15 de julio por debajo de los 11.000 puntos. De hecho, según este banco de inversión, lo más seguro es que, a corto plazo, las Bolsas continúen cayendo. De momento, el Ibex ya retrocede un 25,34% desde enero. Cuando no son los bancos los que generan el desastre, es la economía y, cuando no, los dos. La jornada de ayer vivió esto último. El mercado sabe que la cosa está mal, pero, a veces, se autoengaña. Cuando los espejismos desaparecen, ocurre lo de ayer. Si el lunes los números rojos vinieron porque seguramente el Estado tendrá que salir al rescate de las mayores hipotecarias de EE.UU. y porque la morosidad en España se ha disparado, el martes, las malas noticias vinieron de la economía americana. El mercado inmobiliario de Estados Unidos sigue sin recuperarse y los precios industriales volvieron a subir, metiendo presión inflacionista a una economía endeble. Pero los bancos siguieron dando guerra: según publicaba la prensa, Lehman Brothers estaría analizando alternativas para vender su división de administración de activos. Además, JP Morgan informó de que Lehman podría presentar depreciaciones de activos de hasta 4.000 millones de dólares en el tercer trimestre. Mientras, Goldman Sachs alertaba de que la aseguradora AIG podría verse obligada a ampliar capital. Dentro del Ibex, sólo un sector intentó tirar del Ibex hacia arriba, aunque poco pudo hacer, con sólo dos de sus representantes en positivo: Iberdrola Renovables se apuntó un 0,71%, y Unión Fenosa registró una revalorización del 0,52%. Entre los mejores valores, aunque teñidos de rojo, se colocaron Red Eléctrica, Enagás o Endesa.