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Corbacho insiste en que la prioridad es la contratación laboral interna

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colpisa | madrid

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El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Celestino Corbacho, insistió ayer en su objetivo de promover la contratación de inmigrantes sólo para los puestos que no pueda cubrir el mercado nacional. El titular de Trabajo señaló que una manera de contribuir a recuperar la confianza en este momento es no «crear un alarmismo reiterado y permanente» sobre el aumento del paro. Además, ante el reproche de la diputada del Partido Popular Carmen Álvarez-Arenas de «escudarse» tras el diálogo social, cuando la responsabilidad recae en el Gobierno, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales le pidió que tuviera «más confianza» en la «potencialidad» de España para salir de la crisis. Lo hizo en dos foros distintos, el Pleno del Congreso de los Diputados y la Agencia Española de Cooperación Internacional, lugar este último donde se reunió con 130 embajadores españoles en el extranjero. A ellos les explicó que «los flujos migratorios deben estar en consonancia con el mercado de trabajo», porque «las personas que vienen a nuestro país pretenden mejorar su situación económica de presente y de futuro». Corbacho, que horas antes transmitió la misma idea durante una interpelación parlamentaria que le hizo CiU sobre la necesidad de adecuar la política de inmigración a los cambios experimentados por la realidad normativa y económica más reciente, explicó que «en el nuevo escenario económico, con un significativo incremento del desempleo, es una prioridad promover la contratación interna», tanto de trabajadores nacionales como de residentes. «Cuando esta no pueda satisfacer las demandas de los empleadores, se recurrirá a la externa», aseveró. Respecto a las críticas recibidas desde la oposición por los malos datos de empleo y afiliación, dijo que una manera de contribuir a recuperar la confianza -pretensión anunciada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el miércoles y para la que pidió a todos que «arrimen el hombro»- es «no crear un alarmismo reiterado y permanente». «En absoluto» En este sentido, destacó que la Seguridad Social «goza de buena salud», con un superávit de 12.918 millones de euros y un Fondo de Reserva con 56.000 millones, por lo que «en absoluto» tiene un problema económico.