Los fabricantes auguran que el 2008 será el peor año de la historia
La venta de turismos se desplomó en noviembre un 49,6% interanual
En León cayó un 46,8%, con 7.871 unidades vendidas este año frente a 11.052 del 2007
madrid
El sector del automóvil cae cuesta abajo y sin frenos, lastrado por la crisis económica internacional, el repunte del paro, la dureza del acceso al crédito y el miedo de los ciudadanos a consumir. La venta de turismos se desplomó en noviembre un 49,6% interanual, y a falta de sólo un mes para terminar 2008 acumula un retroceso del 26%. Los fabricantes y vendedores se reconocen «desesperados», dan por hecho que este ejercicio será el peor de la historia y auguran que en 2009 «seguirá la sangría».
En el caso de León, el descenso ha sido sensiblemente menor el caer las ventas un 46,86%,en concreto al pasar de 11.052 unidades a 7.871 en lo que va del 2007.
El sector -”que necesita como el oxígeno la puesta en marcha del plan de apoyo anunciado por el Gobierno-” reconoce que «entre 2007 y 2009 el mercado español perderá más de un 40% de su tamaño, lo que lo situará en niveles de hace tres lustros». Para el próximo ejercicio, la patronal de los fabricantes (Anfac) calcula un desplome de la comercialización del 10%, algo menos pesimista que la de vendedores e importadores (Aniacam), que cifra el agujero en el 15%.
En una crisis que se autoalimenta, la caída de las ventas y el menor pulso de la demanda arrastran a la baja a la producción y minan el empleo en un sector vital para la economía y que da empleo a decenas de miles de personas, tanto directa como indirectamente.
Los expedientes de regulación de empleo (ERE) y el temor sobre la supervivencia de las fábricas están a la orden del día. No en vano, entre enero y noviembre se han vendido casi 400.000 turismos menos que en 2007. Una cantidad de vehículos equivalente a la producción de una factoría española media con tres turnos de trabajadores.
En noviembre, las compras de particulares y empresas no alquiladoras descendieron un 48% y las de rent-a-car, un 64,5%.
Desplomes que se explican en parte por el elevado número de automatriculaciones que hicieron los concesionarios a finales de 2007 con el fin de pagar menos impuestos por los coches más contaminantes, gravados desde el pasado 1 de enero con un tipo más alto. Un condicionante que se repetirá en diciembre y ahondará la crisis de la automoción.
La fotografía por comunidades autónomas sólo deja perdedores.
Así, el recorte de noviembre supera el 50% en Andalucía, Aragón, Baleares, Canarias, la Comunidad Valenciana o Murcia. En términos acumulados (once primeros meses), los peores datos son los de los dos archipiélagos, Murcia, las dos Castillas y La Rioja, muy por encima del 26% promedio.