MAGNA Y OPEL
El comité de GM España reconoce que si se retrasa la venta de Opel "es que algún problema habrá" pero "tiene sentido"
El comité de la planta de General Motors (GM) España, ubicada en la localidad zaragozana de Figueruelas, reconoció hoy que si se retrasa la venta de Opel Europa a la multinacional austriaco-canadiense Magna es "porque algún problema habrá", aunque consideraron que "tiene sentido" cuando dos empresas defienden "sus intereses". En declaraciones a Europa Press, el representante de CC.OO. en la planta, José María Fernando, señaló que "si se ha retrasado ya varias veces la firma, es seguro que algún problema hay". "Ya se retrasó, por ejemplo, porque no tenían acuerdo con los sindicatos españoles y ahora sabemos que ambas empresas tienen conflicto con los royalties y la estructura societaria", reveló Fernando. No obstante, el representante de CC.OO. consideró que estas discusiones son "lógicas en una operación en la que dos grandes empresas defienden sus intereses".
APLAZAMIENTO DE ENCUENTRO
En este sentido, Fernando se refirió al aplazamiento del encuentro previsto para mañana en Mainz (Alemania) entre sindicatos, representantes de las plantas de General Motors europeas y directivos de GM y Magna, que finalmente se celebrará después del consejo de Administración de GM, el 3 de noviembre. "Igual puede tener algo de sentido esperar a que pase el día 3 de noviembre y así conocer lo que sucede, porque si hubiéramos ido mañana habríamos tenido que discutir sobre futuribles e hipótesis", concluyó.
Una vez se firme oficialmente la venta de Opel Europa a Magna, los sindicatos y la empresa deberán volver a sentarse a negociar un plan de ahorro de 265 millones al año para Europa y de 26 millones para la planta zaragozana. La dirección de Magna y los representantes del comité de empresa de Figueruelas alcanzaron un acuerdo sobre el plan industrial para la planta de Opel España el pasado 22 de octubre, tras comprometerse la multinacional austriaca a limitar a 900 el número de bajas en la planta aragonesa, frente a las más de 1.300 previstas anteriormente.
Además, la fábrica zaragozana se mantendrá "intacta" hasta el verano de 2011 y asumiría la producción de la nueva generación del Combo, en caso de que Opel decidiera fabricar este vehículo. Magna también ha ofrecido la garantía de que todos los posibles derivados del Corsa, como fue en su momento el Tigra, se fabricarán en Zaragoza. El acuerdo contempla también el compromiso explícito de Magna de que las piezas para los modelos Corsa de cinco puertas, Meriva y las comunes de los 'corsas' de tres y cinco puertas se estampen en exclusiva en la planta de Figueruelas.