Dispuestos a pagar más por lograr una energía limpia

Los consumidores domésticos españoles, que ya soportan en la factura eléctrica la pesada herencia del déficit de tarifa acumulado, critican las subidas del recibo de la luz, pero parecen mejor dispuestos a pagar para conseguir mejoras de eficiencia y, sobre todo, por una energía más limpia.

Lo constata una encuesta que, sobre una muestra aleatoria y representativa de la población española, realizaron dos investigadores por encargo de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) entre el 12 y el 15 de diciembre pasados.

Informados de que la electricidad utilizada en hogares y empresas es responsable de un 28% de las emisiones de efecto invernadero, uno de cada dos ciudadanos españoles aceptaría desembolsar 300 euros anuales más -”25 euros por recibo mensual-” hasta el 2020, si ese importe se destinara a aplicar un programa equilibrado con el objetivo de reducir el uso de energía en las casas y en las industrias. A los consultados se les dijo que, transcurrido ese plazo, las inversiones realizadas harían menos cara y menos contaminante la producción de electricidad.

Dos tercios de los encuestados se manifestaron muy dispuestos o bastante dispuestos a disminuir su nivel de vida para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.