Reportaje | mercedes gallego
Semana grande
¿Cuántas veces se puede hacer historia en una semana? Los congresistas demócratas se congratulaban ayer de haber hecho dos veces en cinco días lo que nadie había logrado en medio siglo, pasar la reforma sanitaria, que los republicanos lograron devolver a la Cámara de Representantes aprovechando un tecnicismo. Nadie se rajó, incluso hubo un voto más que el domingo.
Era una nueva satisfacción para Barack Obama, que ha vivido en este estreno de la primavera la semana grande de su presidencia. El mandatario radiaba euforia desde que viese cumplida su primera gran promesa electoral, pero ayer volvió a hacer historia al sellar por teléfono «el más amplio tratado de control de armas en casi dos décadas», se ufanó.
Cumplía así su promesa de Praga de hace casi un año, y se dará el lujo de recordarlo en esa misma ciudad el próximo 8 de abril, cuando firme con Medvedev el histórico tratado.