Globovisión rechaza cambiar su línea editorial con chavistas en su directorio
Hugo Chávez, presidente venezolano, anunció el martes su intención de controlar el 48,5% del capital del canal
El canal privado venezolano Globovisión y sus accionistas rechazaron ayer cualquier intento de cambiar su línea editorial, antigubernamental, un día después de que el presidente venezolano, Hugo Chávez, anunciara su intención de controlar el 48,5% del capital. «Resistiremos los atropellos del caudillo», dijo Alberto Federico Ravell, propietario de un 10% de las acciones de la emisora, de la que fue su director hasta hace pocas semanas y desde donde destacó en sus críticas a las políticas del Gobierno.
La emisora ya había subrayado, en un comunicado redactado casi inmediatamente después de que Chávez hiciera pública el martes su intención de que el Estado pase a controlar casi el 50% de la emisora, que su línea editorial «ni se expropia ni se interviene». Chávez sumó el 28,5% accionarial que dijo son del banquero Nelson Mezerhane, dueño de un banco recientemente intervenido por el Estado por falta de liquidez, al 20% de un accionista recientemente fallecido, porcentaje este último que, dijo, «está en el aire».
El gobernante espera hacerse con las propiedades de Mezerhane, entre ellas su participación en Globovisión, para recuperar parte de los 1.600 millones de dólares que calculó como «el aproximado de los ahorros» de los 600.000 clientes del banco intervenido. Ese dinero ha empezado a ser repuesto por la banca estatal a los clientes del banco intervenido.
Chávez también confía en que pase al Estado el 20% de las acciones que estaban en poder del accionista fallecido, alegando que los derechos de herencia no existen en los contratos de concesión del espectro de las ondas de televisión. Chávez remarcó que con ese traspaso de acciones «nadie podrá decir» que su Gobierno «está expropiando».