La ONU denuncia posibles crímenes de guerra en Libia por ataques contra civiles

Las fuerzas del régimen libio de Muamar el Gadafi están utilizando bombas de fragmentación y armamento de guerra en zonas urbanas pobladas de Misrata, lo que podría considerarse como " crímenes de guerra ", dijo hoy la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay.

En su intento por recuperar el control de la ciudad libia de Misrata, los combatientes progubernamentales están lanzando ataques masivos, incluso cerca de instalaciones hospitalarias, al tiempo que han apostado francotiradores que disparan " deliberadamente contra civiles ", declaró. " Se ha informado de que una bomba de fragmentación explotó a pocos cientos de metros del hospital de Misrata, y otras fuentes indican que al menos dos clínicas han sido atacadas con morteros y disparos de francotiradores ", indicó Pillay.

Entre el armamento pesado utilizado por las fuerzas leales a Gadafi figuran bombas de fragmentación, lanzacohetes y morteros, según las informaciones recibidas por la oficina de Pillay. Esta recordó que el derecho internacional señala que el ataque deliberado a instalaciones médicas constituye un crimen de guerra. Tras semanas de combates y con Misrata prácticamente aislada, se desconoce con certeza cuántos muertos y heridos han habido. La alta comisionada pidió al Gobierno libio que levante el asedio sobre Misrata y permita la entrada de ayuda médica y humanitaria para las víctimas del conflicto.

Consideró que la presencia de observadores internacionales, incluidos periodistas, contribuiría a calmar la situación y detener los excesos, una recomendación que por ahora choca con la realidad: al menos dos periodistas han muerto recientemente en Libia y otros 16 están desaparecidos, incluidos varios enviados de la prensa internacional. Otros reporteros han sido detenidos, maltratados físicamente y expulsados del país.