DETALLES DE LA MUERTE DEL LÍDER DE AL QAEDA
Bin Laden planeaba otro 11-S para echar a EEUU del mundo árabe
El terrorista escribía a mano un diario en el que calculaba el número de muertos necesarios para forzar un cambio en la política exterior estadounidense. En algunos documentos instaba a los suyos a com
Pese a su aislamiento en la residencia de Abbottabad (Pakistán), Osama bin Laden seguía planeando y dirigiendo las acciones de Al Qaeda. Así lo ponen de manifiesto los documentos que las fuerzas especiales de EEUU requisaron durante el asalto a la casa, y entre los que se encuentra un diario personal que el líder de Al Qaeda escribía a mano. Según han revelado fuentes de los servicios de inteligencia estadounidenses a la agencia AP, Bin Laden planeaba un nuevo 11-S para forzar un cambio en la política de Washington hacia los países árabes.
A juicio del terrorista, los atentados posteriores al 11-S no fueron suficientes. En un macabro ejercicio de matemáticas, Bin Laden calculaba cuántos estadounidenses debería de matar para forzar la salida de EEUU del mundo árabe. Y concluía que los ataques posteriores a los perpetrados en Nueva York y Washington el 11 de septiembre del 2001 no habían sido suficientes, por tanto, apuntaba, solo un atentado con miles de muertos, en la misma escala que el 11-S, podría provocar cambios en la estrategia de Washington.
Los Ángeles y el 4 de julio
En otros documentos, y siempre con el objetivo de matar al máximo número de estadounidenses posibles, Bin Laden sugiere a sus seguidores que no se limiten a ataques en Nueva York, sino que consideren otras como Los Ángeles o ciudades más pequeñas. También les plantea que los atentados sean no solo en aviones sino también en trenes y que elijan fechas significativas. Entre estas, cita el 4 de julio, día de la independencia en EEUU, o el 10º aniversario del 11-S, el próximo septiembre.
Según reconocieron el miércoles fuentes oficiales de EEUU, aunque estaba alejado de la vida pública, el líder de Al Qaeda nunca perdió el control de su organización. Su diario y los archivos informáticos que analizan los servicios de inteligencia estadounidenses ponen en evidencia que la influencia de Bin Laden está detrás de las últimas acciones de Al Qaeda.
Las fuentes también han apuntado que Bin Laden pensaba fórmulas para provocar las divergencias entre la clase política estadounidense a cuenta del terrorismo.