ATENTADO EN PAKISTÁN
La muerte de Bin Laden no ha acabado con la amenaza del terrorismo islamista
El Gobierno alemán recordó hoy, tras el atentado suicida que ha causado al menos 88 fallecidos en Pakistán, que la muerte del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, no ha acabado con la amenaza del terrorismo islamista.
El ministro de Asuntos Exteriores alemán, el liberal Guido Westerwelle, señaló en un comunicado que " la brutalidad de los terroristas " en el ataque contra una academia policial del norte de Pakistán demuestra que la espada de Damocles del islamismo violento sigue pendiendo sobre los países de todo el mundo.
Por eso, agregó Westerwelle " la comunidad internacional, pero también el propio Pakistán, debe seguir luchando con acciones decididas contra el terrorismo " de carácter islamista. El jefe de la diplomacia alemana tachó el atentado suicida de Pakistán de " ataque cruel y malvado " y se solidarizó con el pueblo paquistaní y los familiares de las víctimas.
El movimiento talibán paquistaní (TTP), que reivindicó hoy en un medio local la autoría del doble atentado suicida contra una academia de las fuerzas de seguridad en el norte de Pakistán, aseguró que se trataba de " una venganza por la muerte de Osama Bin Laden " y amenazó con nuevas acciones.