Strauss Kahn toma fuerza de nuevo como candidato socialista en Francia

El socialismo francés vuelve a soñar con la vida en rosa. El vuelco en el caso DSK ha despertado la ilusión de resucitar al que se había enterrado como un cadáver político. Los juglares de la oposición a Nicolas Sarkozy ya tararean en voz baja el cantar de un Cid providencial de vuelta a la vida política con la misión de conquistar el Elíseo después de muerto. Dominique Strauss Kahn era el 14 de mayo, día de su arresto en Nueva York, el indiscutible favorito de la izquierda gala para desalojar al conservador Sarkozy de la jefatura del Estado en las presidenciales del 2012. A diez meses de la cita con las urnas, el electorado ha descubierto su enfermiza adicción al sexo así como su querencia al lujo y el dinero. Pero sus partidarios siguen convencidos de que es el caballo ganador si, como esperan, resulta rehabilitado por la justicia estadounidense.

El giro del caso ha pillado al Partido Socialista (PS) francés con el paso cambiado. La secretaria general, Martine Aubry, formalizó su candidatura a las primarias el martes nada más abrirse la competición para elegir al retador de Sarkozy. La también alcaldesa de Lille se sintió liberada del pacto informal de no agresión sellado con Strauss Kahn. Pero parece acudir a la cita con el destino a regañadientes, más por obligación que por devoción. Arrastra el gen paterno de Jacques Delors, el hombre que dijo 'no' cuando todos los sondeos le colocaban en el Elíseo, precisamente en el programa televisivo de Anne Sanclair, la mujer de DSK. «Espero de todo corazón que la Justicia americana establezca toda la verdad y permita a Dominique salir de esta pesadilla», declaró ayer Aubry, sumergida por la «inmensa alegría» de las noticias llegadas desde la otra orilla del Atlántico. Pero eludió responder a las peticiones de modificación del calendario de las primarias que ya formulan los más estrechos colaboradores de DSK en el partido. Trece aspirantes La clausura de la presentación de candidaturas está prevista para el 13 de julio, para celebrar las votaciones el 9 y el 16 de octubre. De momento hay ya trece aspirantes, una nómina provisional que encabezan François Hollande, Aubry, Ségolène Royal, Arnaud Montebourg y Manuel Valls según el orden de las intenciones de voto. Parar el reloj y abrir un paréntesis para facilitar la candidatura de un Strauss-Kahn rehabilitado es una hipótesis abiertamente planteada por sus partidarios. Pero todos los responsables socialistas dejan la decisión última en manos del propio interesado.