Al menos 40 muertos en dos atentados en el norte de Bagdad

Al menos 40 personas han muerto y otras 45 han resultado heridas este martes en dos atentados ocurridos en Tayi, 20 kilómetros al norte de Bagdad, según han explicado fuentes policiales iraquís. Se trata uno de los atentados más sangrientos que vive el país árabe en lo que va de año. Los atentados se han producido cerca de la sede del Consejo Municipal de Tayi.

Primero ha estallado un coche bomba y minutos después lo ha hecho el artefacto explosivo. Entre los muertos hay varios miembros de las fuerzas de seguridad iraquís. Las explosiones han causado además graves daños en los edificios cercanos y en los vehículos aparcados en la zona. Tras el atentado, efectivos del Ejército y de la policía han cerrado todas las calles que conducen al lugar del doble atentado.

Según ha explicado un policía de la ciudad, de mayoría suní, ha explicado que un vehículo conducido por un kamikaze ha explotado sobre las 12.00 horas (11.00 horas en España) frente a la puerta principal del edificio municipal cuando las autoridades celebraban una " importante reunión para mejorar los servicios públicos locales ". " El alcalde, los jefes tribales y miembros de los servicios de seguridad estaban presentes cuando se ha producido la primera explosión ", ha apuntado el agente, que no ha precisado si estos figuran entre las víctimas del ataque.

En los últimos días Irak está sufriendo una serie de ataques contra objetivos militares y policiales que han causado ya decenas de muertos en distintos puntos del país. Sin embargo, el de este martes ha sido uno de los más sangrientos en lo que va de año. Uno de los más mortíferos tuvo lugar el pasado 29 de marzo cuando 65 personas fallecieron durante un asalto contra la sede del gobierno provincial de Salahedin en la ciudad de Tikrit.

El pasado mes de junio fue el que más víctimas registró desde inicios del 2011 con al menos 271 muertos iraquís y 15 soldados de Estados Unidos, según los datos oficiales. El atentado más grave del mes pasado tuvo lugar el 23 de junio, cuando perdieron la vida 21 personas al estallar tres artefactos en los alrededores de un mercado en el suroeste de Bagdad, mientras que dos días antes los fallecidos fueron 25 al explotar dos coches bomba al sur de la capital.