El gobierno provisional libio se instala en Trípoli

A pesar de que prosiguen los combates y la búsqueda de Muamar Gadafi, el Consejo Nacional de Transición (CNT) de Libia ha empezado ya a tomar posiciones de cara a la nueva etapa política. El gobierno provisional de los rebeldes, hasta ahora instalado en Bengasi, feudo de la insurgencia, se ha trasladado a Trípoli, una vez la capital ha caído en manos de los revolucionarios. Así lo ha confirmado esta madrugada el vicepresidente del CNT, Alí Tahouni. Ocho altos cargos del CNT llegaron a última hora del jueves a la capital para preparar la transición política, ha explicado por su parte el portavoz del gobierno provisional, Mahmud Chammam. Uno de los temas que el Consejo de Transición tiene sobre la mesa es el referente a los fondos económicos libios que Occidente congeló para aislar a Gadafi.

El Consejo de Seguridad de la ONU ha aceptado desbloquear 1.500 millones de dólares de esos fondos, según han avanzado fuentes diplomáticas. Asimismo, la ONU ha dado luz verde a una ayuda de urgencia destinada a la reconstrucción de un país devastado tras más de seis meses de guerra. Los 1.500 millones que van a ser descongelados dependen de Estados Unidos, que quieren dividir la cantidad en tres partes de 500 millones; una para las organizaciones humanitarias internacionales; otra para el CNT, para pagar salarios y servicios básicos, y otra para un fondo internacional para Libia para comprar carburante y bienes de primera necesidad.

Por su parte, Italia anunció el jueves su disposición a descongelar los fondos libios que hay en el país, estimados en 350 millones de euros. En Trípoli, las tropas rebeldes siguen combatiendo a las fuerzas del régimen que todavía resisten en algunos barrios. En el este de Libia, los insurgentes intentan avanzar hacia Sirte, ciudad natal de Gadafi, que, según algunas fuentes, habría sido bombardeada por aviones de la OTAN. Sirte es un bastión del régimen y uno de los lugares donde podría refugiarse el dictador.