Monti celebra en Italia su segundo Consejo y prepara citas europeas
El nuevo primer ministro italiano, Mario Monti, no ha tardado ni un minuto en tomar las riendas del Gobierno tecnócrata de Italia con intensas sesiones de trabajo, en las que analiza las cuentas públicas del país y prepara importantes citas europeas previstas para esta semana.
El economista, quien recibió el apoyo parlamentario a su Gobierno hace solo tres días, presidió ayer su segundo Consejo de Ministros (el primero fue inmediatamente tras jurar el cargo el miércoles), tras pasar todo el fin de semana trabajando entre la sede de la Presidencia del Ejecutivo y el Ministerio de Economía del que también es titular.
En su primera reunión operativa —la del miércoles fue un mero trámite institucional—, el Gobierno Monti aprobó su primer decreto ley, sobre la capitalidad de Roma, una norma que tenía en su agenda el anterior Ejecutivo, presidido por Silvio Berlusconi, y que había bloqueado el federalista partido Liga Norte. La norma, que prevé la transferencia de algunas competencias del Estado al Ayuntamiento de Roma, fue aprobada en primera lectura y ahora deberá pasar por el Parlamento para que el Ejecutivo, en un plazo de 90 días, la apruebe en segunda lectura.
Devolver la confianza. Esto es solo un adelanto de las reformas de un Gobierno que tiene como principal objetivo devolver la confianza de los mercados en las finanzas de Italia y relanzar el crecimiento, ante la imposibilidad que para ello demostró el Ejecutivo del dimisionario Berlusconi.
Sobre la mesa del Gobierno estuvo ayer también un primer análisis de las medidas que cada ministro considera que son necesarias para su departamento y que Monti ilustrará a las autoridades comunitarias en las próximas reuniones.
Tras el Consejo de Ministros, el titular para la Integración y la Cooperación Internacional, Andrea Riccardi, aseguró a los periodistas que en su Gabinete prima el diálogo y la colegialidad e indicó que probablemente la próxima reunión del Ejecutivo tendrá lugar el viernes.