Obama: "América no está en declive"

Lejos quedan los turbulentos años de George Bush, donde la política exterior dominó algunos de sus discursos del Estado de la Unión. Aunque el asunto pasó anoche de puntillas, el presidente Barack Obama aprovechó la ocasión para rebatir a aquellos dentro y fuera de EEUU que creen que sus días como potencia hegemónica están contados. "Cualquiera que os diga que América está en declive o que su influencia se ha reducido, no sabe de qué está hablando", dijo ganándose la ovación del hemiciclo. Obama defendió además los resultados de su apuesta por el multilateralismo y advirtió a Irán una vez más de que no tolerará que se haga con la bomba atómica.

La política exterior es ojos de los estadounidenses el capítulo más lustroso de su gestión, por más que algunos republicanos le acusen de vender a sus aliados y pilotar con resignación el declive. Obama quiso responderles asegurando que las alianzas de EEUU con Europa, Asia y Latinoamérica son hoy más estrechas y aseguró que la influencia de su país ha reverdecido. Y puso como ejemplo el caso de Irán. "Gracias al poder de nuestra diplomacia , un mundo que estaba dividido sobre la manera de afrontar el programa nuclear de Irán, se mueve hoy al unísono", dijo.

Obama aseguró que "el régimen está hoy más aislado que nunca" y que la presión, en forma de "durísimas sanciones", continuará hasta que haga falta. "Que no quede ninguna duda: América está decidida a prevenir que Irán se haga con armas nucleares y mantendrá todas las opciones sobre la mesa para lograrlo", dijo refiriéndose eufemísticamente al uso de la fuerza. Mensaje a Asad

También mandó un recado al régimen sirio de Bashar al Asad , aunque sin sugerir en ningún momento que EEUU vaya a apoyar una operación militar como la que condujo la OTAN en Libia ayudando a acabar con la dictadura de Gadafi. "No tengo ninguna duda de que el régimen de Asad descubrirá pronto que las fuerzas del cambio no pueden revertirse y que la dignidad humana no puede negarse".

Obama dijo que EEUU se juega mucho en las primavera árabe , pero que deben ser los ciudadanos de los países implicados los que moldeen su destino. "Nosotros defenderemos los mismos valores que tan bien han servido a nuestro país. Nos opondremos a la violencia y la intimidación. Defenderemos los derechos y la dignidad de todos los seres humanos, hombres y mejeres, cristianos, musulmanes y judíos. Y apoyaremos políticas que conduzcan a democracias fuertes y mercados abiertos porque la tiranía no es rival de la libertad ".

Nada luce tanto en el expediente de Obama como sus éxitos en la lucha contra Al Qaeda , empezando por la muerte de Osama bin Laden . El mandatario estadounidense lo atribuyó en parte al fin de la guerra de Irak , otra de las medallas que cuelgan de su hoja de servicios. "Acabar con la guerra de Irak nos ha permitido golpear decisivamente a nuestros enemigos. Desde Pakistán a Yemen", aseguró.