Escocia fija su referéndum para la independencia en el 2014
En un claro desafío al Gobierno británico, el ministro principal de Escocia, Alex Salmond, presentó ayer en Edimburgo su plan para la celebración de un referéndum sobre la independencia, que se celebraría en el 2014.
En el Palacio de Holyrood, sede del parlamento escocés, Salmond invocó «el derecho de la gente a decidir sobre su futuro» para presentar un plan que consiste en la celebración de un referéndum que planteará la pregunta: «¿Está de acuerdo en que Escocia sea un país independiente?».
Fue una jornada de símbolos y referencias. El discurso de Salmond coincidió con la celebración del «Día de Burns», una de las fiestas más tradicionales y genuinamente escocesas, que conmemora el nacimiento del poeta Robert Burns.
En una fecha tan significativa, el ministro principal calificó la consulta como «la decisión más importante de la gente de Escocia en 300 años» y dijo que «un país que habla con voz propia muestra más altura en el mundo y toma responsabilidades sobre su futuro»
Las dudas legales sobre la capacidad de Edimburgo para proponer el referéndum y que su resultado sea vinculante no están muy claras en un país donde no existe una Constitución escrita.