Una rebelión policial en Maldivas fuerza la dimisión del presidente Mohamed Nashid
El presidente de Maldivas, Mohamed Nashid, renunció ayer a su cargo forzado por una rebelión encabezada por la policía, que se unió a la oposición para desbancar al que fue el primer mandatario salido de unas elecciones multipartidistas.
En una rueda de prensa televisada en directo poco después del mediodía, Nashid justificó la decisión en su deseo de evitar «el uso de la fuerza» y «el daño a los ciudadanos», a los que deseó prosperidad «en esta vida y en la de después». «Si el Gobierno se mantiene en el poder es muy posible que haya interferencias extranjeras», añadió Nashid en su alocución, sin especificar a que países se refería.
Diversas fuentes afirmaron que el poder recaerá ahora en el vicepresidente, Mohamed Wahid, quien parece contar con el apoyo de los grupos opositores a Nashid. «Los principales partidos respaldan a Wahid y lo más probable es que agote la actual legislatura, que acaba a finales del 2013», dijo el portavoz del opositor Partido Progresista de Maldivas (PPM), Mohamed Hussein Sharif. Esa fuente añadió que Nashid está «bajo custodia militar» y que su dimisión «era la única salida que le quedaba tras haber perdido el apoyo de las fuerzas de seguridad».
Nashid intentó aplacar las protestas alentadas por diversas fuerzas políticas. Poco antes de anunciar su dimisión, su oficina aseguró que el presidente «trabajaba con las otras instituciones para asegurar la estabilidad».