SEGÚN THE WASHINGTON POST
EEUU e Israel desarrollaron conjuntamente el virus Flame
Los gobiernos de Estados Unidos e Israel desarrollaron de forma conjunta el sofisticado virus Flame, que recolectó información de cara a un sabotaje destinado a mostrar la capacidad de Irán para desarrollar armas nucleares, según han informado fuentes occidentales al diario estadounidense The Washington Post.
La compañía de seguridad en Internet Karspersky descubrió a finales de mayo el virus Flame, diseñado para recopilar información sensible y presente en ordenadores de Irán, Oriente Próximo e incluso Estados Unidos. Karspersky reveló que Flame es el software de espionaje más complejo descubierto hasta la fecha y que llevaba operativo al menos cinco años, por lo que ha alertado de que pueden estar en funcionamiento otras armas similares.
Pocos días después salió a la luz que los responsables de desarrollar el virus Flame colaboraron en la creación de Stuxnet, que atacó los sistemas informáticos iraníes en 2011. Investigadores de seguridad encontraron pruebas firmes que confirman dicha colaboración. Los virus fueron desarrollados por dos equipos distintos, que compartieron una parte del código en las primeras fases de creación.
En los esfuerzos de creación de Flame participaron la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), la CIA y el Ejército israelí, según The Washington Post. Los detalles que están surgiendo en torno al plan apuntan a una campaña sostenida de cibersabotaje contra Irán.
"Se trata de preparar el campo de batalla para otro tipo de operaciones encubiertas", ha dicho un ex alto cargo de la Inteligencia estadounidense, que ha agregado que Flame y Stuxnet son parte de un asalto más amplio que sigue vigente a día de hoy. "La recolección de datos contra el programa nuclear iraní ha ido mucho más allá que esto", ha agregado.
En este sentido, el diario estadounidense The New York Times apuntó directamente al presidente estadounidense, Barack Obama, como el responsable de autorizar el desarrollo y la utilización de Stuxnet y otras ciberarmas. El diario citó a personal del programa de desarrollo de estas iniciativas para confirmar que Estados Unidos e Israel fueron los responsables de los ataques contra Irán.
Según dichas fuentes, Obama, después de suceder a George W. Bush, se encontró con un programa denominado Olympic Games, enfocado al desarrollo de ciberarmas. Obama decidió aumentar los recursos de este plan y autorizó de forma directa que se realizasen ataques contra los sistemas iraníes.
Tras realizar los ataques con Stuxnet, virus que se asegura que tiene un código 50 veces más complejo que un 'malware' normal, los analistas aseguraron que se había conseguido retrasar en aproximadamente 18 meses el desarrollo nuclear de Irán. Por su parte, Irán aseguró que había conseguido controlar Stuxnet y que el virus no había afectado a sus sistemas.
Así, esta fuente de Inteligencia ha apuntado que el esfuerzo realizado "es proporcional al problema que se intenta resolver", en referencia al programa nuclear iraní. Además, ha recalcado que, aunque se haya descubierto la existencia de Stuxnet y Flame, "eso no significa que no haya otras herramientas en juego o que estén actuando de forma efectiva".
Por su parte, los portavoces de la CIA, la NSA, y la Embajada israelí en Washington, no han querido realizar comentarios a estas informaciones tras ser contactados por The Washington Post.
Desarrollo de herramientas
El desarrollo de estas herramientas de sabotaje informático estaría siendo llevado a cabo por la NSA, conocida por sus escuchas electrónicas y su capacidad para desencriptar códigos, así como por su experiencia en el desarrollo de códigos maliciosos destinados a enemigos de Estados Unidos; y la CIA, que no tiene la sofisticación de la NSA en la creación de 'malware', pero muy involucrada en la campaña cibernética de espionaje.
El Centro de Operaciones de Información de la CIA (IOC), lleva a cabo una amplia gama de labores de espionaje, incluida la extracción de información de ordenadores incautados en operaciones antiterroristas. Sin embargo, el IOC está especializado en penetraciones informáticas que requieren un contacto cercano con el objetivo, tales como el uso de espías y contratistas involuntarios que expandan el contagio a través de unidades de disco USB.
Ambas agencias analizan la información obtenida a través de 'malware' como Flame y han desarrollado nuevas armas relacionadas, a pesar de que los últimos ataques han sido descubiertos.