Al menos 15 fallecidos y más de 30.000 evacuados por las inundaciones de Filipinas
Al menos 15 personas murieron y unas 33.000 tuvieron que dejar sus casas a raíz de las inundaciones y aludes de tierra causados en Filipinas por las incesantes lluvias que colapsaron Manila y nueve provincias cercanas. La mayoría de las víctimas mortales se registraron en el distrito de Quezon, a las afueras de Manila, donde los equipos de rescate retiraron de entre el lodo los cadáveres de nueve miembros de una misma familia, entre ellos un niño de dos meses, que quedaron sepultados por un desprendimiento de tierra.
Ocho residentes en las viviendas del mismo vecindario lograron escapar con vida del alud, según el periódico Philippine Star .
Además, la Policía informó de que cuatro personas murieron ahogadas en la provincia de Bulacan, al norte de la capital. Las autoridades confirmaron otras dos víctimas mortales en los distritos de Malabon y Caloocan, zonas costeras donde las labores de rescate están siendo difíciles debido a las inundaciones y al corte del suministro eléctrico. Con estas muertes asciende a 68 el número de víctimas mortales desde que la semana pasada atravesó parte de Filipinas la tormenta tropical Saola , que forzó a más de 268.000 personas a dejar sus casas en el norte del archipiélago. El presidente, Benigno Aquino, ordenó el cierre de los colegios, de los centros de trabajo, excepto las de las agencias de emergencia que atienden a miles de evacuados.