Diez votos, cinco para cada uno
La diminuta aldea de Dixville Notch, en el estado de Nuevo Hampshire, escenificó un minuto después de la medianoche de ayer la primera votación de la jornada electoral del 6 de noviembre con resultado de empate entre el presidente demócrata Barack Obama y su rival republicano Mitt Romney.
Cinco votos para Obama y cinco votos para Romney fue el resultado de la votación presidencial de este pequeño asentamiento, cuya tradición de voto de madrugada atrajo la atención de los medios.
Según dijo sorprendido uno de los responsables de cuantificar los votos, que se iban escribiendo en una pizarra, esta es la primera vez que se da un empate en el recuento a viva voz de los votos de Dixville Notch.
La tradición se mantienen desde 1960 y puede ser la prueba de lo que ya dicen las encuestas, y es que esta contienda presidencial puede ser la más apretada desde el año 2000.
Otras pequeñas aldeas de Nuevo Hampshire, un estado que se considera clave, ya que se podría decantar hacia el lado demócrata o republicano, llevaron a cabo la tradición de votar y publicar los resultados en la madrugada. No obstante, al cierre de esta edición, más de 31 millones de estadounidense ya depositaron su papeleta de manera anticipada o por correo en 34 estados y el Distrito de Columbia.