El primer ministro de Gaza pide ayuda a los "hermanos" de Egipto

El primer ministro de la Franja de Gaza, Ismail Haniyeh, ha pedido ayuda a los "hermanos" de Egipto para ayudar a Hamás en su lucha contra el "enemigo", en plena escalada de violencia entre las milicias palestinas y el Ejército israelí.

"Llamamos a los hermanos de Egipto a tomar medidas para disuadir al enemigo", ha asegurado Haniyeh, que parece no conformarse con los gestos de apoyo llegados desde El Cairo y reclama medidas más precisas, informa la agencia Reuters.

El presidente egipcio, Mohamed Mursi, tachó de "inaceptable" la "agresión" emprendida por Israel contra la Franja de Gaza, donde desde el miércoles han muerto al menos 16 palestinos, según un nuevo balance conocido este jueves por la tarde.

Fuentes médicas citadas por la agencia palestina Maan han asegurado que la decimosexta víctima mortal es un bebé de diez meses que resultó herido en el bombardeo contra una vivienda del barrio de Zeitoun, en la capital gazací.

Las Fuerzas de Defensa de Israel emprendieron el miércoles una ofensiva denominada 'Pilar de Defensa' que se desarrolla en respuesta al constante lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza. Tres israelíes han muerto por estos proyectiles.

El primer ministro egipcio, Hisham Kandil, y otros cargos de seguridad tienen previsto realizar el viernes una visita a Gaza. A los apoyos recibidos por Hamás se ha unido el del presidente de Túnez, Moncef Marzouki, que ha llamado por teléfono al primer ministro de Gaza.

Se reanudan los bombardeos

Tras unas horas sin actividad militar israelí sobre la Franja, este jueves por la noche se han reanudado los bombardeos. Testigos citados por Reuters han informado de más de 25 ataques en un corto periodo de tiempo. La agencia Maan también habla de "decenas" de bombardeos.

Las tensiones no dan muestra de frenarse, especialmente después de que este jueves Hamás y Yihad Islámica hayan lanzado al menos dos proyectiles contra Tel Aviv, una ciudad que no ha sido alcanzada directamente pero donde ya han sonado las alarmas. La capital comercial israelí no había sido atacada desde la Guerra del Golfo, en 1991.