CONFLICTO EN ÁFRICA OCCIDENTAL
La UE aprueba una misión para adiestrar al ejército de Malí
Los Veintisiete respaldan a Francia, pero sólo aportarán apoyo financiero y logístico a la intervención militar internacional
El Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea (UE) ha aprobado la puesta en marcha de una misión de adiestramiento del Ejército de Malí para que puede enfrentarse con eficacia a las fuerzas islamistas aliadas de Al Qaida que controlan más de la mitad del país. Los Veintisiete han expresado su respaldo a la intervención militar francesa para frenar el avance islamista, pero solo aportarán un apoyo financiero y logístico a la intervención militar africana prevista en Malí para expulsar a los islamistas y restablecer la unidad territorial del país.
Los ministros han pedido acelerar el despliegue de los instructores militares europeos en la capital del Malí, Bamako. Los instructores deberían estar en Malí a mediados de febrero como muy tarde, según han acordado los Veintisiete. El objetivo es adiestrar a cuatro batallones del ejército de Malí para que pueda combatir con efectividad a los grupos islamistas que controlan el norte del país.
La misión de instrucción tendrá una duración inicial de 15 meses y contará con unos 200 instructores. Con el personal de apoyo y la fuerza de protección, la misión europea de adiestramiento ascenderá en total a unas 450 personas. El personal de esta misión de instrucción no participará en las operaciones de combate en Malí, han subrayado los ministros europeos. La misión de adiestramiento estará al mando del general francés François Lecointre, el cuartel general se situará en Bamako y el adiestramiento se realizará en la mitad sur del país, lejos de la zona de combates.
De momento ya hay ocho países ya han confirmado su voluntad de participar en la misión de adiestramiento: España, Francia, Alemania, Italia, Suecia, Estonia, Eslovenia y Bélgica. El presupuesto de la UE aportará 12,5 millones de euros para financiar la misión, a lo que deberán añadirse los costes de personal que deberá asumir cada país que participe en la operación.