Ordenado por la Fiscalía
Procesan a 94 personas por planear un golpe de Estado en Emiratos Árabes
Un total de 94 personas serán procesadas por planear un golpe de Estado en Emiratos Árabes Unidos (EAU), según ha anunciado este domingo el fiscal general, Salem Saeed Kubaish, en un comunicado publicado por la agencia de noticias oficial, WAM.
Kubaish ha explicado que, aunque los acusados hacían llamamientos a unirse al Islam, "su objetivo real era hacerse con el poder". "Lo estaban planeando todo en las reuniones secretas que celebraban en sus casas, granjas y otro sitios", ha detallado.
El fiscal general ha indicado que los acusados se valían de Internet --sobre todo de las redes sociales-- para generar en la opinión pública una actitud hostil hacia el Gobierno de EAU, "atacando el imperio de la ley".
Los acusados incluso habrían conseguido penetrar en las instituciones estatales, sobre en las docentes, como colegios, institutos y universidades, mediante la creación de una red de empresas a partir de fondos públicos.
Además, Kubaish ha denunciado que, al parecer, los acusados "estaban en contacto con Hermanos Musulmanes y otras organizaciones extranjeras, a las que pidieron ayuda, asesoramiento y financiación para hacerse con el poder en EAU".
El año pasado, las autoridades emiratíes detuvieron a unas 60 personas, en su mayoría miembros de Al Islah, un grupo vinculado a Hermanos Musulmanes que está prohibido en el país árabe, de acuerdo con 'Al Jaleej'.
El diario privado ha asegurado que todos los detenidos habrían confesado que crearon una organización y un grupo armado con la única finalidad de hacerse con el poder y implantar un Estado islámico en EAU.
Al Islah ha negado que pretenda dar un golpe de Estado, aclarando que su propósito es promover una serie de reformas que implican más derechos civiles y más poder para el Consejo Nacional, un órgano cuasi parlamentario, así como sus vínculos con Hermanos Musulmanes.
EAU es uno de los países que ha conseguido sortear la llamada Primavera Árabe gracias, en parte, a la persecución de la disidencia interna, a la que hasta ahora toleraba sin mayores consecuencias. Si bien, el año pasado retiró la nacionalidad a siete personas por razones de seguridad nacional.