Francia, en «vigilancia absoluta» por amenazas terroristas
Hollande cree que los ataques de París y Londres no son aislados.
El presidente francés, François Hollande, aseguró ayer que su país mantiene una «vigilancia absoluta» por la amenaza terrorista del exterior y del interior, seis días después del ataque de un joven islamista radical contra un militar en París.
«Lo que pasa en el mundo tiene consecuencias en nuestro país», dijo Hollande en una entrevista radiotelevisada en la que insistió en que esa labor de vigilancia para garantizar la seguridad de los franceses «no ha cesado nunca».
Dos días después de la detención del presunto autor del ataque al soldado, que se produjo tras la muerte de otro en Londres también presuntamente obra de islamistas radicales, Hollande aseguró: «no desperdiciamos ninguna pista».
Sin embargo solicitó una «mejor cooperación» entre los diferentes servicios de información franceses, después de que los medios de comunicación galos informaran de que el atacante en París era conocido por su actitud fundamentalista y se mencionara una eventual falta de coordinación. «Prestamos atención a que ninguna información pueda dejar de ser tratada» garantizó el presidente, quien además se refirió al perfil de atacantes como los de Londres y París: «son individuos aislados que no pasan a la acción progresiva, sino radicalmente».
Error
Aseguró que sería un «error» decir que ese tipo de ataques «son actos aislados», puesto que «necesitan un entorno, no necesariamente una organización».
Y alertó de la amenaza «interna» al aludir a ciudadanos franceses que se desplazan a zonas del mundo, «teatros de operaciones», los llamó, «y que luego vuelven con ciertas ideas, proclamaciones, y que han tenido la experiencia de las armas, tenemos que prestar atención a eso».
Las palabras de Hollande se conocieron durante una entrevista que el presidente concedió a dos canales de televisión y a una radio en la que se dedicó además a abordar la política exterior de Francia en África y Oriente Medio, con especial atención a los casos de Mali, Siria, Libia, Argelia y en general en el Sahel.
Porque Hollande, casi seis meses después del comienzo de la operación militar gala en Mali, quiso proclamar que en ese país se han cumplido los «objetivos militares y prácticos» sobre el terreno y que ahora ha llegado el momento de dar una solución política.
Militar y prácticamente, no hay ya una parte de Mali que pueda estar bajo el control de los terroristas», aseguró Hollande, quien dijo que «una gran parte» de los terroristas en ese país africano está fuera de combate.