Bruselas espera a la ONU antes de culpar a El-Asad
La diplomacia europea mantiene su calculada cautela en torno a la cuestión siria y a la más que probable intervención militar de Estados Unidos en Damasco. Nadie duda ya de la utilización de este tipo de arma, las diferencias ahora se centran en señalar al culpable y por ende, actuar. Por ello, la Alta Representante de Política Exterior de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, sigue abogando por la prudencia a la espera de los informes definitivos de los expertos enviados por la ONU. «Preferimos esperar a ver los resultados del informe antes de hacer juicio definitivo», recalcó su portavoz, Michael Mann, en relación a la autoría del atroz ataque que según la versión estadounidense provocó mas de mil muertos.
Desde que Damasco, parapetada en el férreo apoyo de Rusia, Irán o China, decidiera cruzar la línea roja del uso de armas químicas contra la población civil -el régimen sirio, por contra, acusa a los rebeldes-, han sido decenas las preguntas realizadas a los portavoces de la UE sobre lo sucedido pero sobre todo, por los pasos que países socios comenzaban a dar de forma individual. Este fin de semana se reunirán en Vilna, capital de Lituania, los ministros de la UE para analizar «los últimos acontecimientos y nuestra respuesta».