Estados Unidos enseña los dientes
«Esto no es ‘Rocky IV’», resumió el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, John Kerry, en referencia a la mítica película en la que Silvester Stallone se enfrenta a un boxeador ruso, pero la situación actual es lo más parecido a la Guerra Fría que Washington y Moscú han visto en muchos años. Se trataría de una guerra ‘proxy’ que ambos países disputarían en un tercer Estado, Ucrania, que intenta conjugar en su futuro la vecindad y los intereses comerciales que lo vinculan a la ex potencia soviética con la vocación de apertura hacia Occidente. Una cosa es dar asilo a Edward Snowden con su maleta de datos sobre la seguridad nacional estadounidense, y otra intervenir militarmente en Ucrania, ahora que este país se inclina hacia Europa. Por Ucrania, EE UU está dispuesto a mostrarle los dientes a Rusia.
«Sería un gran error» (que Rusia invadiera Ucrania), advirtió Kerry ante un grupo de periodistas estadounidenses que le entrevistaban. El secretario de Estado de Barack Obama situó la actual amenaza en el contexto de la ofensa que representaría para el pueblo ucraniano, ahora que hace acopio de fuerzas para regenerar su Gobierno, pero no dudó en añadir que una agresión semejante «requeriría una respuesta apropiada de mucha gente distinta en lugares distintos». Más específicamente, añadió, «creo que Naciones Unidas y otros reaccionarían de manera adversa».
Tanto EE UU como Rusia firmaron en 1994 un tratado para garantizar la integridad territorial ucraniana, un tratado que Kerry considera «muy vigente».