VIOLENCIA EN EL ESTE AFRICANO
Los yihadistas somalís perpetran otro ataque terrorista en Kenia
La milicia Al Shabab asesina a 10 personas tras asaltar un pueblo cercano a Mpeketoni
Residentes locales se reúnen en el incendiado Hotel de la Granja, tras el ataque terrorista en Mpeketoni, este lunes.
Al menos diez personas murieron este lunes por la noche en Kenia en un supuesto ataque islamista cometido cerca de la ciudad de Mpeketoni, donde la milicia somalí Al Shabab mató al menos a 48 personas un día antes, han confirmado este martes las autoridades.
El atentado de anoche se produjo en el pueblo de Poromoko (noreste de Kenia), ha precisado el comisionado del condado de Lamu, Stephen Ikua, citado por la radio keniana Capital FM. Un grupo de pistoleros invadió la localidad, tiroteó a los vecinos y prendió fuego a varias viviendas, ha indicado la misma fuente.
Efectivos de la Policía han sido desplegados en la zona para reforzar la seguridad y determinar el número exacto de víctimas, ha agregado el comisionado.
El ataque ocurrió un día después de que la vecina localidad de Mpeketoni fuera objeto de un atentado que se atribuyó el grupo islamista somalí Al Shabab y que causó al menos 48 muertos, pese a la promesa del Gobierno de proteger a la ciudadanía.
La matanza en Mpeketoni es el peor atentado que sufre el país africano desde el pasado septiembre, cuando al menos 67 personas murieron en el asalto perpetrado por milicianos de Al Shabab al centro comercial Westgate de Nairobi.
Oleada de secuestros
Kenia --especialmente Nairobi y la ciudad costera de Mombasa-- ha sido objeto de numerosos ataques desde que, en octubre del 2011, su Ejército entrara en Somalia debido a una oleada de secuestros en suelo keniano que atribuyó a la milicia islamista somalí.
Al Shabab, que en el 2012 anunció su adhesión formal a la red terrorista Al Qaeda, controla amplias zonas del centro y el sur de Somalia, donde el frágil Gobierno somalí todavía no está en condiciones de imponer su autoridad.
Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país sin un gobierno medianamente efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra y bandas de delincuentes armados.