Colombia sigue contando muertos y se pregunta si la tragedia pudo evitarse
Los rescatadores trasladan un cuerpo.
Colombia asimilaba ayer, un día después del suceso, que tardará mucho tiempo en encontrar a todos los muertos de la tragedia de Salgar, en el noroeste del país, donde casas y familias enteras fueron arrastradas por una riada que ahora muchos se preguntan si podía haberse evitado.
La fuerza del agua de la quebrada Liboriana arrasó la madrugada de este lunes cuanto había a su paso en la aldea de Las Margaritas, la más afectada del municipio de Salgar, en el departamento de Antioquia, donde las secuelas del desastre todavía son bien visibles.
Trozos de lo que fueron paredes, madera rota, piedras de todos los tamaños y toneladas de lodo dificultan el paso de las casi 400 personas que componen los equipos de búsqueda en Las Margaritas, donde vivían unos 500 vecinos, que se presupone salieron a la carrera cuando oyeron la llegada del torrente.
Pero son especulaciones, ya que todavía no se ha podido determinar el número de desaparecidos en la riada, aunque el resto de las pesimistas cifras suben a cada hora poco a poco, a cuentagotas.
Según el director de socorro nacional de Cruz Roja Colombiana, César Ureña, la cifra de fallecidos se sitúa por el momento en 69 personas, en tanto que los heridos, confirmó ayer el presidente Juan Manuel Santos, ascienden a 37.