Cameron y Hollande pactan abordar la inmigración ilegal
El primer ministro británico, David Cameron, y el presidente francés, François Hollande, han acordado abordar la inmigración ilegal tras la crisis desatada en el puerto francés de Calais por los intentos de decenas de personas de llegar a Inglaterra a través del eurotúnel.
Cameron telefoneó el viernes por la noche al mandatario galo, con el que analizó la situación en Calais y en particular en la terminal de Coquelles, donde cada noche numerosos inmigrantes intentan entrar en el túnel que une Francia e Inglaterra por debajo del canal de La Mancha, se indica en un comunicado de Downing Street.
Los dos líderes expresaron su preocupación por los actuales «retos de seguridad» y reiteraron su compromiso de «seguir trabajando juntos para abordar los problemas que plantea la inmigración ilegal».
Ambos acordaron también colaborar con la concesionaria Eurotunnel, que opera las conexiones ferroviarias en el canal, para vigilar la zona mientras que funcionarios de franceses y británicos analizarán en los próximos días más medidas para mejorar la situación.
Cameron anunció el viernes que el Reino Unido enviará «más perros adiestrados, más vallas y más asistencia» para reforzar la seguridad en Calais, donde más de 3.500 inmigrantes indocumentados han tratado en la última semana de entrar al eurotúnel.